Colecho
14:02
Yo colecho…
Tú colechas…
Todos colechamos…
Al empezar la mejor aventura de
mi vida, es decir, la aventura de tenerte, no sabía que era el colecho. Según
yo y mis ilusiones, desde el primer momento dormirías en tu cuarto y nosotros
en el nuestro. Según yo, para que se te haga costumbre y no te "malacostumbres" irías derechito de la clínica a tu cuna.
Pero tras la cesárea, la
incomodidad, el frio, el llanto, el cansancio, decidimos seguir nuestro
instinto y dejarte habitar en nuestra cama.
Tuve muchísimas críticas, gente
que me apoyaba, gente que me miraba extrañada, gente de todo. Pero la peor es la
gente preguntona sin tino. Gente que pregunta, pregunta y pregunta hasta que de
cansada te sacan la respuesta. Ya, sí, hasta ahora hago colecho con Mateo.
¿Contentos?
No es que lo haya leído, no es
que lo haya investigado, simplemente sucedió y creo que fue la mejor opción.
Fue una decisión de pareja la cual sentimos que nos trajo muchos beneficios. Sé
que tarde o temprano irás a tu cuarto, y quizás dentro de unos años ya no me dejes entrar seguido
(¿alguien dijo adolescentes?) y pasaremos a otras etapas. Por el momento
disfruto de tus abrazos nocturnos, de sentir tus manitos en mi cabeza y de
asegurarme que estás protegido y abrigado.
Para mí el colecho me mostró otra
forma de compartir contigo y tienen sus beneficios como el sueño calmo y
profundo, una lactancia fácil y eficaz, impacto positivo en tu desarrollo,
menos estrés y seguridad.
Nuestra sociedad
todavía lo tilda de inapropiado pero este acto se viene practicando desde hace
muchísimo tiempo. Creo, en mi experiencia, que si se toma las medidas
necesarias como la higiene y la seguridad, no hay ningún problema.
¿Le decimos sí al colecho?
Besos
Mamá Luz
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